Nombre científico:
Passiflora edulis
Nombres vernáculos:
Fruta de la pasión, granadilla o maracuyá.
Familia:
Pasiflorácea
Reino:
Plantae
Características:
Árbol que puede llegar a 50 metros de altura, originario de América Tropical aunque en América Central y Sudamérica existen algunas plantaciones. Su fruto es redondo u ovalado, de 30-40 g de peso y con piel púrpura dura. La pulpa interior es amarilla-rojiza y contiene cerca de 150 semillas negras.
Principios activos:
Rico en azúcares, vitaminas y minerales. En la fruta de la pasión los azúcares más abundantes son la glucosa y la fructosa, y también contiene ácido cítrico, láctico y málico. Destaca la presencia de la vitamina A y C así como vitaminas del grupo B (B1, B2, B3) . También contiene minerales como potasio, calcio, fósforo, magnesio y hierro.
Además, la fruta contiene carotenoides (con actividad provitamina A), tiamina, niacina y riboflavina
Usos tradicionales:
La fruta de la pasión contiene carotenoides que se utilizan como antioxidantes y antirradicales libres. A nivel popular es una fruta recomendada para tratar las alteraciones nerviosas, como ansiolítico, sedante, relajante muscular, para bajar la tensión y como fuente de vitamina C.
Propiedades cosméticas:
- – Es un potente antioxidante capaz de neutralizar los radicales libres y dotar al organismo de un poder defensivo en contra de la degradación de las células. Actúa combatiendo el estrés ambiental y el daño oxidativo de la polución, previniendo el envejecimiento prematuro.
- – Presenta actividad antiinflamatoria, hidrata y calma a las pieles sensibles y/o irritadas.
- – Actividad regeneradora y antienvejecimiento, aumentando la elasticidad y suavidad de la piel.
- – Regula la pérdida de agua transepidérmica (TEWL) y restaura la función barrera por su contenido en ácidos grasos