Las manchas en la piel o trastornos de hiperpigmentación son uno de los principales problemas en dermatología. Aumentan con la edad debido a la acumulación del sol recibido durante toda nuestra vida o después de un verano tomando el sol, ya que el bronceado es un mecanismo de defensa de la piel para protegernos del daño solar, sintetizando más melanina.
¿Qué es la melanina?
La melanina es el pigmento que produce nuestro cuerpo y da color a la piel, los ojos o el cabello. Los diferentes fototipos de piel (color de piel) viene determinada por la cantidad de melanina en la piel. Las personas más blancas producen muy poca melanina y las de piel morena producen más. Los melanocitos son las células que se encargan de la producción de melanina. La melanina se distribuye en la piel de forma uniforme, pero en algunas ocasiones se acumula formando acúmulos o manchas.
Tipos de manchas de la piel
Léntigos: son pequeñas manchas de color marrón visibles y definidas y que suelen localizarse en las áreas o zonas del cuerpo más expuestas al sol como la cara, el cuello, el escote o las manos. Por eso se denominan también manchas seniles o manchas de la vejez. Los léntigos son benignos, sin riesgo para la salud pero también son un indicador de lo que ha sufrido la piel en su exposición al sol.
Melasma: es una pigmentación de la piel que causa manchas oscuras de diversos tamaños, generalmente en mejillas, zona de bigote y frente. Es común en mujeres y que aparezca durante el embarazo o bajo la toma de anticonceptivos, pero puede aparecer en cualquier mujer y de forma menos frecuente, también en hombres. El melasma es más común en fototipos oscuros. El desencadenante clave del melasma también es el sol.
Hiperpigmentación post-inflamatoria: En este caso, el aumento de la melanina se produce debido a la cicatrización de la piel tras una lesión cutánea o una inflamación. Las personas con acné son más propensas a sufrir este tipo de manchas. A veces puede estar desencadenada por procedimientos estéticos, como dermoabrasión, exfoliaciones químicas o tratamientos con láser. Aunque todos los tipos de piel pueden verse afectados de hiperpigmentación postinflamatoria, afecta más a los fototipos oscuros.
¿Cómo podemos prevenir las manchas?
Como sabéis, lo más importante en la prevención es la protección solar. Os recomendamos reaplicar el protector solar si estáis más de 2 horas al sol, también es importante protegernos con ropa UV, sombreros y gorras en las horas de mayor exposición o por ejemplo en la playa.
Los principales activos para el tratamiento de manchas cutáneas son:
Inhibidores de la síntesis de melanina: Se ha demostrado que la vitamina C es un poderoso antioxidante con acción despigmentante, ya que inhibe la enzima tirosidasa inhibiendo la síntesis de melanina y evitando así la aparición de manchas. Pero no sólo eso, también reduce el tamaño de la mancha ya instaurada. La vitamina C también es antiinflamatoria. Inhibe la reacción en cascada de la inflamación mediante el bloqueo de ciertas enzimas, por lo que también está indicada para calmar la piel irritada o propensa al acné.
Otro de los ingredientes más interesantes y que utilizamos en nuestros serums, para prevenir el daño solar es el ácido ferúlico. Es un potentísimo antioxidante que neutraliza los radicales libres protegiendo la piel de la contaminación ambiental, el tabaco y de los dañinos rayos UVB y UVA. También inhibe la melanogénesis, siendo más efectivo que el ácido kójico como tratamiento despigmentante.
La vitamina E es un antioxidante liposoluble que abunda en el extracto córneo, donde impide la peroxidación lipídica, es decir, evita que se oxiden los ácidos grasos que forman las membranas lipídicas de la piel. Se evita así una reacción en cadena en la que las especies reactivas de oxígeno (ROS) alterarían la biosíntesis de colágeno y glicosaminoglicanos en la piel. También inhibe el proceso de melanogénesis al impedir la producción de melanina en células de melanoma producidas por la radiación UV.
Al igual que existen numerosos estudios que avalan las propiedades de cada uno de estos antioxidantes, existen diferentes investigaciones que demuestran el incremento de los resultados obtenidos cuando se elaboran formulaciones incorporando los 3 activos, vitamina C, vitamina E y ácido ferúlico, como es el caso de nuestros BIO SERUM Vitamina C y Ácido Ferulico oil free (para pieles mixtas y grasas) y Nutritive Repair (para pieles más secas).
Inhibidores de la síntesis de melanina y renovadores del estrato córneo: El ácido azelaico es un gran aliado contra manchas y marcas en la piel, sobre todo las que acompañan a procesos acneicos. Gracias a su función queratolítica ayuda a disminuir el engrosamiento de la piel, acelerando el proceso de renovación celular, sustituyendo a las células dañadas por células nuevas. También inhibe a la enzima tirosinasa que es la encargada de producir la melanina que como sabemos, da lugar a la aparición de manchas en la piel. Por lo tanto, el ácido azelaico presenta acción despigmentante por estas dos vías de acción, ayudando a combatir el melasma y cualquier otra pigmentación de tipo post- inflamatorio, el acné y las secuelas causadas por el acné, además de la rosácea. Por todo ello es uno de los activos estrella en nuestro nuevo BIO SERUM AZELAIC TREATMENT.
Las lesiones cutáneas y manchas en la piel de las que hablamos aquí no son perjudiciales para la salud, aunque hay otro tipo de machas que si pueden ser peligrosas, por eso desde Cosmetics Herbera siempre recomendamos visitar al dermatólogo para que pueda valorarlas.
Referencias:
The effect of Vitamin C on melanin pigmentation – A systematic review
Comparison of efficacy of products containing azelaic acid in melasma treatment