Doble limpieza facial: qué es y cómo realizarla

¿Qué es la doble limpieza?

Como su propio nombre indica se trata de limpiar tu piel dos veces, con dos productos diferentes, uno de base oleosa y otro de base acuosa, para terminar, con la aplicación de un tónico o mist. Esta práctica lleva muchos años instaurada en la cosmética coreana y hace un tiempo que empezó a hablarse de ello en nuestro país. Hoy te contamos todos los secretos de la doble limpieza y cómo llevarla a cabo con productos ecológicos y respetuosos con tu piel.

¿Cuáles son los beneficios de la doble limpieza?

Los beneficios de la doble limpieza son muchos. Debemos tener en cuenta que la polución, el maquillaje, los protectores solares, los residuos de tocarnos la cara, etc. depositan impurezas diariamente en nuestra piel. Si a esto le sumas la secreción sebácea natural de la piel y el sudor, el resultado es una capa en la superficie cutánea, difícil de eliminar de una sola pasada. ¿Qué ocurre? Que la piel se congestiona, se muestra apagada, opaca, y aparecen imperfecciones. Pero es que, además, los productos de tratamiento que aplicamos en nuestra rutina facial no penetran bien, por lo que no pueden llevar a cabo su función al 100%. Por eso, realizar la doble limpieza facial, al menos una vez al día, limpia la piel en profundidad y de forma no agresiva, absorbe impurezas, retira el exceso de sebo de la piel, las células muertas, la suciedad que se acumula en los poros y facilita la penetración de los principios activos de los productos que utilizamos como tratamiento well-aging.

¿Qué pasos hay que seguir para realizar la doble limpieza?

El secreto de la doble limpieza por supuesto está en hacerla con los productos adecuados. El primer paso se debe hacer con un producto de base oleosa, de esta manera, por su afinidad lipídica, no sólo limpia de manera superficial si no que penetra mejor en los poros y elimina la suciedad que ahí se suele acumular, el maquillaje, el protector solar, la polución, la crema hidratante, etc. es decir, elimina cualquier tipo de suciedad que sea soluble en grasa. Por cierto: pieles grasas, podéis hacer una doble limpieza sin miedo. El primer paso más graso no solo retirará suciedad, sino también exceso de sebo.
Para este primer paso os recomendamos nuestro bálsamo GOLDEN DUNE, formulado con mantecas de mango y karité que junto a los aceites de zanahoria, brócoli, albaricoque y maracuyá orgánicos limpian la piel en profundidad, equilibran el manto hidrolipídico y mantienen la piel maravillosamente hidratada.

Con la espátula aplica una pequeña cantidad en tus manos para que el producto se caliente un poquito y masajea el rostro, con los ojos cerrados, insiste en las pestañas para eliminar el maquillaje y también en los labios. Aprovecha su textura para regalarte un masajito también en el cuello y escote.
Para retirarlo puedes usar una muselina orgánica previamente humedecida en agua tibia o aclarar con agua. GOLDEN DUNE al entrar en contacto con el agua se convertirá en una delicada leche limpiadora, arrastrando también la suciedad soluble en agua.
Está indicado para todo tipo de pieles, incluyendo a las más sensibles. Puedes leer más sobre este producto aquí.

Ahora ya estás lista para el segundo paso.

El objetivo del segundo paso de la limpieza facial es aseguramos de retirar todas las impurezas sin base grasa, que serían las partículas contaminantes, el sudor y las células muertas acumuladas durante el día. Para esto se utiliza un producto de base acuosa, muy respetuoso y no agresivo para no dañar nuestro pH natural. Para ello hemos lanzado BLACK MOON, un bálsamo limpiador que aporta las propiedades detoxificantes del carbón vegetal activado limpiando eficazmente la piel, absorbiendo las impurezas más profundas, el exceso de grasa y las células muertas. Está formulado con cáñamo, comino negro, aloe vera, reishi, sacha inchi y flor de la pasión, una explosión de activos seborreguladores que ayudan a purificar y equilibrar la piel. Puedes leer más sobre sus propiedades en la ficha del producto.

La forma de aplicarlo es sencilla, una vez retirado el bálsamo anterior y con la piel seca, masajeamos Black Moon prestando especial atención en zonas como la barbilla, frente o el surco nasogeniano, después emulsionamos con agua para crear una refrescante leche limpiadora y finalmente secamos con una muselina orgánica.

¿Puedo utilizar estos bálsamos limpiadores también como mascarillas?

Sí, nuestros bálsamos limpiadores presentan doble función. Si tu piel es mixta o grasa, te recomendamos que uses BLACK MOON como mascarilla 1-2 veces por semana, durante 5-10 minutos, te ayudará a regular tu secreción sebácea.
Y si tu piel es seca, te recomendamos que apliques GOLDEN DUNE como mascarilla nutritiva dejándola actuar sobre tu piel durante toda la noche. Gracias a su formulación regula la pérdida de agua transepidérmica (TEWL) y restaura la función barrera, nutriendo, reparando e iluminando la piel.

¿Existe un tercer paso para la rutina de limpieza facial?

Después de la doble limpieza, lo ideal es acabar este ritual con una bruma o tónico que además de equilibrar el pH, potencie la respuesta del sistema inmune de la piel. Nuestra Bruma REISHI & HYALURONIC IMMUNITY MIST es mucho más que un tónico porque mantiene un pH saludable fortaleciendo la barrera cutánea, disminuye las marquitas residuales del acné y cicatrices posquirúrgicas, estimula síntesis de colágeno y elastina y sobre todo, refresca, hidrata y repara la piel.

Ahora sí las propiedades de tus BIO SERUM y tu crema hidratante se van a ver multiplicados porque tu piel por fin está receptiva para absorber todos sus principios activos.