Cuando llega el buen tiempo, todos empezamos a pensar en protección solar. Pero… ¿sabes realmente qué tipo de filtros contiene tu fotoprotector? ¿Es mineral o sintético? ¿Y cómo puedes saberlo al leer la etiqueta?

Hoy te explicamos de forma clara cómo distinguir un solar mineral (físico) de uno sintético (químico), cuáles son sus principales diferencias y qué dice la regulación sobre ello. Al final, te contamos cómo lo hacemos en HĒRBERA con nuestro protector solar Soleá SPF 30.

¿Qué es un filtro solar mineral?

Un filtro mineral, también llamado físico, actúa como un escudo reflectante sobre la piel. Su funcionamiento es puramente mecánico: refleja y dispersa los rayos solares UVA y UVB. Los dos únicos ingredientes autorizados en la Unión Europea como filtros minerales son:

  • Óxido de zinc (Zinc Oxide)
  • Dióxido de titanio (Titanium Dioxide)

Ambos están permitidos en cosmética solo si no están en forma de nanopartículas.

 ¿Y qué es un filtro solar sintético?

Los filtros sintéticos (también conocidos como orgánicos o químicos) funcionan de forma diferente: absorben la radiación UV y la transforman en calor, disipándola. Algunos de los más comunes son:

  • Octocrylene
  • Ethylhexyl methoxycinnamate (tambien llamado Octinoxate)
  • Avobenzone
  • Homosalate
  • Oxybenzone

Estos ingredientes son resultado de la síntesis química y, aunque son eficaces, algunos de ellos han sido prohibidos en algunas playas por su potencial impacto ambiental (por ejemplo, en arrecifes de coral) o por posibles efectos sobre la salud hormonal si se absorben en cantidades significativas.

Regulación europea: ¿qué dice la normativa?

En la Unión Europea, todos los filtros solares deben estar recogidos en el Anexo VI del Reglamento (CE) Nº 1223/2009 sobre productos cosméticos. Además, deben usarse en las concentraciones autorizadas y contar con estudios de seguridad que avalen su uso.

Para que un producto pueda llevar un SPF en su etiquetado, se recomienda que haya sido testado siguiendo la metodología COLIPA (ahora Cosmetics Europe), especialmente mediante ensayos in vivo, que evalúan la eficacia del fotoprotector sobre piel humana.

¿Cómo saber qué tipo de filtro lleva tu protector solar?

Muy sencillo: mira la lista de ingredientes (INCI). Aquí tienes una pequeña guía:

Si ves esto en el INCI…Zinc Oxide, Titanium Dioxide. Es un filtro…mineral.

Si ves: Octocrylene, Avobenzone, Ethylhexyl methoxycinnamate, se trataría de un filtro sintético, químico u orgánico.

Además, si el producto está certificado como ecológico (COSMOS, ECOCERT…), casi con total seguridad utilizará únicamente filtros minerales no nano, ya que estos sellos no permiten filtros químicos convencionales.

¿Qué tipo de filtro usa Herbera en Soleá SPF 30?

Soleá cream ecológica certificada antioxidante con alta protección solar

 

  • En Herbera formulamos Soleá SPF 30 con óxido de zinc no nano y dioxido de titanio no nano también, ambos filtros minerales seguros, eficaces y autorizados para cosmética natural certificada.
  • Protege de forma amplia frente a rayos UVA y UVB
  • Apto para piel sensible y uso diario
  • Está testado in vivo con metodología COLIPA para asegurar que el SPF indicado en el envase es real y demostrable.
  • Es respetuoso con tu piel y con el medio ambiente: sin nanopartículas, sin siliconas, sin disruptores endocrinos ni fragancias sintéticas.

Puedes conocer más sobre Soleá en este artículo completo de nuestro blog

 

 

En resumen

No todos los solares son iguales. Si quieres elegir con criterio, echa un vistazo al INCI y busca fórmulas que prioricen tu salud, la eficacia demostrada y la sostenibilidad.

Tu piel merece un protector que lo haga todo: cuidar, proteger y respetar.

4 thoughts on “¿Cómo distinguir un protector solar natural de uno sintético?

    • ¡Hola! Entendemos perfectamente tu duda. SPF 30 puede parecer “bajo” en comparación con un SPF 50, pero en realidad la diferencia en protección UVB es mínima: un SPF 30 bloquea aproximadamente el 97% de la radiación, y un SPF 50, alrededor del 98%. Es decir, ambos protegen prácticamente igual.

      La única diferencia real está en la frecuencia de reaplicación, no en el nivel de protección. Y como en Herbera formulamos con filtros minerales no nano, que tienden a aumentar el espesor de la crema, hemos optado por un SPF 30 que ofrece una alta protección, pero con una mejor textura y cosmeticidad, para que sea más agradable de usar cada día y te animes a reaplicarla cuando lo necesites.

      Lo importante es usar la cantidad adecuada y reaplicar si estás al sol o te mojas. Así, un SPF 30 bien aplicado puede proteger igual de bien que un SPF 50.

  1. Compré el protector Soleá porque quería uno sin ingredientes químicos dañinos y la verdad es q me gusta bastante. El único pero q le pongo es q al tener la piel grasa me da brillos. Sería ideal uno específico para pieles grasas. Es mi sugerencia. Enhorabuena por todo lo q hacéis. Saludos

    • ¡Muchísimas gracias por tu mensaje y por confiar en Soleá! Nos alegra mucho saber que te gusta y que valoras que esté formulado sin filtros químicos controvertidos, con ingredientes seguros tanto para la piel como para el entorno.

      Es cierto que, al formular con filtros minerales no nano, conseguimos una protección eficaz y respetuosa, pero el acabado puede resultar algo más brillante, especialmente en pieles grasas. Es algo que tenemos en cuenta, y valoramos mucho tu sugerencia.

      Por ahora, no tenemos una versión específica para piel grasa, pero seguimos mejorando nuestras fórmulas para que se adapten a distintos tipos de piel manteniendo nuestra filosofía. ¡Gracias por tu apoyo y por ayudarnos a crecer con tus aportaciones!

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